La cosecha de cereales de invierno y maíz podría alcanzar los 16,55 Mt, según los últimos datos del Ministerio

El Ministerio de Agricultura (MAGRAMA) estima que la cosecha de cereal de invierno alcanzará los 12,26 Mt en la campaña de comercialización 2012/13, de acuerdo con su último Avance de Superficies y Producciones de 31 de julio. Esta cifra es 440.000 tn más baja que la del avance de mayo y representa el 72,7% e la cosecha de la campaña 2011/12, cuando se llegó a 16,88 Mt, a pesar de que en la campaña actual las siembras han sido un 3% más elevadas. Por tanto, se estaría hablando de que las dificultades meteorológicas por las que se ha atravesado este año habrían echado a perder más del 27% de la cosecha, en comparación con el año anterior. 
Las estimaciones del MAGRAMA son más optimistas que las cifras que Cooperativas Agroalimentarias publicó a finales de julio pasado, en las que preveía una cosecha de 11,58 Mt.

El Ministerio estima descensos en todos los tipos de cereales. La producción de trigo blando descendería en un 22,16% en relación con la campaña previa, llegando a 4,64 Mt, la de trigo duro en un 50% (472.800 tn) y la de cebada en un 27% (6,04 Mt).

Las estimaciones de producción de cereales de primavera, campaña 2011-2012, registran incrementos en el maíz (+3,3%) hasta los 4,29 Mt y descensos en el arroz (-7,7%) hasta los 849.200 tn. La evolución de la producción va en la misma línea en la que ha evolucionado la superficie sembrada de ambos cereales.

Las estimaciones del MAGRAMA en cuanto a la cosecha de maíz también son más optimistas que las de Cooperativas Agroalimentarias que estimaban en julio pasado 3,88 Mt.

Las estimaciones de producción de leguminosas grano muestran descensos en guisantes secos
(-48,2%), habas secas (-47,8%), veza (-41,9%), altramuz dulce (-37,5%), garbanzos (-26,7%), judías secas (-21,4%), y yeros (-8,8%). En lentejas se estima aumento de producción (+33,3%) acompañado de un menor aumento en superficie cultivada (+6,3 %). La observación de los datos de sus superficies cultivadas permite concluir que los descensos son debidos a la disminución en sus rendimientos.

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