Castilla y León, a través de su Plan Estratégico de la Patata 2010-2013, incidirá en la mejora de la capacidad de producción y almacenaje para intentar introducir en el mercado nacional el millón de toneladas de este tubérculo que se consume pero que no se produce en España.
En el país, según indicó hoy la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta, Silvia Clemente, los consumidores adquieren 3,5 millones de toneladas de patatas pero sólo salen de sus tierras 2,5 millones. De ahí que la Comunidad, que aporta actualmente el 38 por ciento de esa producción, pretenda esforzarse para poner en el mercado ese millón que falta.
Castilla y León, con más de 5.200 productores, es la cuarta generadora de patatas en el total de cultivos a nivel nacional y la segunda en cultivos de regadíos. Su producción en 2009 alcanzó el millón de toneladas y la superficie cultivada ascendió a 23.000 hectáreas; no obstante, la campaña se caracterizó por las dificultades generadas por una mayor superficie de siembra y una mayor productividad por hectárea, que conllevó a su vez la existencia de una mayor oferta que demanda y el descenso de los precios.
La 'importancia' de este sector, que ofrece una 'gran variedad y calidad', aunque también la 'alta especulación' que encierra, favoreció el impulso de un Plan Estratégico que ordenara y regulara el mercado. Dicho Plan, publicado hoy en el Boletín Oficial de la Comunidad (Bocyl) y dotado con 61.284.000 euros, recoge los grandes objetivos que se pretenden alcanzar y que incluyen, aparte de regular el mercado, obtener mejores precios para los agricultores.
Entre las líneas del mismo, figura el fomento de la coordinación entre todos los agentes a través de la ya articulada Mesa de la Patata y la futura creación de una organización interprofesional; la coordinación de acciones administrativas para mejorar la información estadística y lanzar boletines informativos; mejorar las estructuras de las explotaciones a través de convocatorias de ayudas a la inversión productiva; la certificación de las producciones; la mejora de la competitividad del tubérculo en siembra para ahorrar costes, y el control de la producción.
El Plan incidirá especialmente en mejorar la capacidad de conservación y almacenamiento para que la patata castellanoleonesa prolongue su presencia en la cadena alimentaria y pueda hacer frente así a los tubérculos que llegan de Francia para abastecer la demanda en los meses de primavera. REIVINDICACIONES DE LAS OPA
Se trata de una reivindicación de las propias organizaciones agrarias (OPA) de la Región --Asaja, COAG, UPA y UCCL--, con las que la Junta consensuó el programa y que hoy mostraron su apoyo unánime al mismo. 'Incluye casi el cien por cien de nuestras propuestas', aseguró el coordinador regional de COAG, Aurelio Pérez.
Así, las OPA confían en que el Plan Estratégico ayude a alcanzar mayores cuotas de producción y a 'escalonar' la presencia de la patata para que los consumidores no tengan que adquirir tubérculos de otros países.
'Hay que hacer un esfuerzo en la conservación y el almacenamiento y llegar a acuerdos con la distribución para que se garantice la venta durante un periodo largo en el año', expresó el presidente de Asaja en la Comunidad, Donaciano Dujo.
En este mismo sentido se manifestó el coordinador de la Unión de Campesinos de Castilla y León, Jesús Manuel González Palacín, quien recordó que el sector 'tiene muchos picos y ha generado muchas pérdidas' y apuntó la necesidad de que Castilla y León sea 'capaz' de autoabastecerse de patata de siembra y de concienciar a los consumidores sobre la calidad de las variedades castellanoleonesas.
'Castilla y león es productora de patata no lavada, hay que conseguir que se venda por sus cualidades culinarias, pues no es sólo un adorno', apostilló.
CAMPAÑAS DE PROMOCIÓN
Por su parte, el secretario autonómico de UPA, Julio López, recalcó la responsabilidad de los agricultores en la gestión de sus explotaciones según las medidas de este programa y coincidió en la importancia de los productores se hagan, a través del cooperativismo, con estructuras de almacenaje para que se escalone la puesta de la patata en el mercado y llegue a éste 'en las mejores condiciones'.
Asimismo, señaló la relevancia de se produzca una variedad acorde con la demanda del consumidor --'los tiempos y los gustos cambian', reconoció--, de la creación de una interprofesión donde 'se sienta también la distribución', así como de la existencia de un contrato que garantice un precio.
Entre otros aspectos, el Plan estratégico incidirá igualmente en lograr que los productores y transformadores consigan un precio acorde a los costes de producción; incrementar el valor añadido mediante la promoción bajo el paraguas de 'Tierra de Sabor'; alcanzar la orientación en el mercado en la gestión de las empresas; aumentar el consumo en diferente estratos de la población a través de campañas de comunicación, y coordinar acciones de I+D+i.
En el país, según indicó hoy la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta, Silvia Clemente, los consumidores adquieren 3,5 millones de toneladas de patatas pero sólo salen de sus tierras 2,5 millones. De ahí que la Comunidad, que aporta actualmente el 38 por ciento de esa producción, pretenda esforzarse para poner en el mercado ese millón que falta.
Castilla y León, con más de 5.200 productores, es la cuarta generadora de patatas en el total de cultivos a nivel nacional y la segunda en cultivos de regadíos. Su producción en 2009 alcanzó el millón de toneladas y la superficie cultivada ascendió a 23.000 hectáreas; no obstante, la campaña se caracterizó por las dificultades generadas por una mayor superficie de siembra y una mayor productividad por hectárea, que conllevó a su vez la existencia de una mayor oferta que demanda y el descenso de los precios.
La 'importancia' de este sector, que ofrece una 'gran variedad y calidad', aunque también la 'alta especulación' que encierra, favoreció el impulso de un Plan Estratégico que ordenara y regulara el mercado. Dicho Plan, publicado hoy en el Boletín Oficial de la Comunidad (Bocyl) y dotado con 61.284.000 euros, recoge los grandes objetivos que se pretenden alcanzar y que incluyen, aparte de regular el mercado, obtener mejores precios para los agricultores.
Entre las líneas del mismo, figura el fomento de la coordinación entre todos los agentes a través de la ya articulada Mesa de la Patata y la futura creación de una organización interprofesional; la coordinación de acciones administrativas para mejorar la información estadística y lanzar boletines informativos; mejorar las estructuras de las explotaciones a través de convocatorias de ayudas a la inversión productiva; la certificación de las producciones; la mejora de la competitividad del tubérculo en siembra para ahorrar costes, y el control de la producción.
El Plan incidirá especialmente en mejorar la capacidad de conservación y almacenamiento para que la patata castellanoleonesa prolongue su presencia en la cadena alimentaria y pueda hacer frente así a los tubérculos que llegan de Francia para abastecer la demanda en los meses de primavera. REIVINDICACIONES DE LAS OPA
Se trata de una reivindicación de las propias organizaciones agrarias (OPA) de la Región --Asaja, COAG, UPA y UCCL--, con las que la Junta consensuó el programa y que hoy mostraron su apoyo unánime al mismo. 'Incluye casi el cien por cien de nuestras propuestas', aseguró el coordinador regional de COAG, Aurelio Pérez.
Así, las OPA confían en que el Plan Estratégico ayude a alcanzar mayores cuotas de producción y a 'escalonar' la presencia de la patata para que los consumidores no tengan que adquirir tubérculos de otros países.
'Hay que hacer un esfuerzo en la conservación y el almacenamiento y llegar a acuerdos con la distribución para que se garantice la venta durante un periodo largo en el año', expresó el presidente de Asaja en la Comunidad, Donaciano Dujo.
En este mismo sentido se manifestó el coordinador de la Unión de Campesinos de Castilla y León, Jesús Manuel González Palacín, quien recordó que el sector 'tiene muchos picos y ha generado muchas pérdidas' y apuntó la necesidad de que Castilla y León sea 'capaz' de autoabastecerse de patata de siembra y de concienciar a los consumidores sobre la calidad de las variedades castellanoleonesas.
'Castilla y león es productora de patata no lavada, hay que conseguir que se venda por sus cualidades culinarias, pues no es sólo un adorno', apostilló.
CAMPAÑAS DE PROMOCIÓN
Por su parte, el secretario autonómico de UPA, Julio López, recalcó la responsabilidad de los agricultores en la gestión de sus explotaciones según las medidas de este programa y coincidió en la importancia de los productores se hagan, a través del cooperativismo, con estructuras de almacenaje para que se escalone la puesta de la patata en el mercado y llegue a éste 'en las mejores condiciones'.
Asimismo, señaló la relevancia de se produzca una variedad acorde con la demanda del consumidor --'los tiempos y los gustos cambian', reconoció--, de la creación de una interprofesión donde 'se sienta también la distribución', así como de la existencia de un contrato que garantice un precio.
Entre otros aspectos, el Plan estratégico incidirá igualmente en lograr que los productores y transformadores consigan un precio acorde a los costes de producción; incrementar el valor añadido mediante la promoción bajo el paraguas de 'Tierra de Sabor'; alcanzar la orientación en el mercado en la gestión de las empresas; aumentar el consumo en diferente estratos de la población a través de campañas de comunicación, y coordinar acciones de I+D+i.
Castilla y León, con más de 5.200 productores, es la cuarta generadora de patatas en el total de cultivos a nivel nacional y la segunda en cultivos de regadíos. Su producción en 2009 alcanzó el millón de toneladas y la superficie cultivada ascendió a 23.000 hectáreas; no obstante, la campaña se caracterizó por las dificultades generadas por una mayor superficie de siembra y una mayor productividad por hectárea, que conllevó a su vez la existencia de una mayor oferta que demanda y el descenso de los precios.
La 'importancia' de este sector, que ofrece una 'gran variedad y calidad', aunque también la 'alta especulación' que encierra, favoreció el impulso de un Plan Estratégico que ordenara y regulara el mercado. Dicho Plan, publicado hoy en el Boletín Oficial de la Comunidad (Bocyl) y dotado con 61.284.000 euros, recoge los grandes objetivos que se pretenden alcanzar y que incluyen, aparte de regular el mercado, obtener mejores precios para los agricultores.
Entre las líneas del mismo, figura el fomento de la coordinación entre todos los agentes a través de la ya articulada Mesa de la Patata y la futura creación de una organización interprofesional; la coordinación de acciones administrativas para mejorar la información estadística y lanzar boletines informativos; mejorar las estructuras de las explotaciones a través de convocatorias de ayudas a la inversión productiva; la certificación de las producciones; la mejora de la competitividad del tubérculo en siembra para ahorrar costes, y el control de la producción.
El Plan incidirá especialmente en mejorar la capacidad de conservación y almacenamiento para que la patata castellanoleonesa prolongue su presencia en la cadena alimentaria y pueda hacer frente así a los tubérculos que llegan de Francia para abastecer la demanda en los meses de primavera. REIVINDICACIONES DE LAS OPA
Se trata de una reivindicación de las propias organizaciones agrarias (OPA) de la Región --Asaja, COAG, UPA y UCCL--, con las que la Junta consensuó el programa y que hoy mostraron su apoyo unánime al mismo. 'Incluye casi el cien por cien de nuestras propuestas', aseguró el coordinador regional de COAG, Aurelio Pérez.
Así, las OPA confían en que el Plan Estratégico ayude a alcanzar mayores cuotas de producción y a 'escalonar' la presencia de la patata para que los consumidores no tengan que adquirir tubérculos de otros países.
'Hay que hacer un esfuerzo en la conservación y el almacenamiento y llegar a acuerdos con la distribución para que se garantice la venta durante un periodo largo en el año', expresó el presidente de Asaja en la Comunidad, Donaciano Dujo.
En este mismo sentido se manifestó el coordinador de la Unión de Campesinos de Castilla y León, Jesús Manuel González Palacín, quien recordó que el sector 'tiene muchos picos y ha generado muchas pérdidas' y apuntó la necesidad de que Castilla y León sea 'capaz' de autoabastecerse de patata de siembra y de concienciar a los consumidores sobre la calidad de las variedades castellanoleonesas.
'Castilla y león es productora de patata no lavada, hay que conseguir que se venda por sus cualidades culinarias, pues no es sólo un adorno', apostilló.
CAMPAÑAS DE PROMOCIÓN
Por su parte, el secretario autonómico de UPA, Julio López, recalcó la responsabilidad de los agricultores en la gestión de sus explotaciones según las medidas de este programa y coincidió en la importancia de los productores se hagan, a través del cooperativismo, con estructuras de almacenaje para que se escalone la puesta de la patata en el mercado y llegue a éste 'en las mejores condiciones'.
Asimismo, señaló la relevancia de se produzca una variedad acorde con la demanda del consumidor --'los tiempos y los gustos cambian', reconoció--, de la creación de una interprofesión donde 'se sienta también la distribución', así como de la existencia de un contrato que garantice un precio.
Entre otros aspectos, el Plan estratégico incidirá igualmente en lograr que los productores y transformadores consigan un precio acorde a los costes de producción; incrementar el valor añadido mediante la promoción bajo el paraguas de 'Tierra de Sabor'; alcanzar la orientación en el mercado en la gestión de las empresas; aumentar el consumo en diferente estratos de la población a través de campañas de comunicación, y coordinar acciones de I+D+i.
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