lunes, 21 de septiembre de 2015

El VI Mercado de Alimentos Ecológicos de UCCL reúne en Valladolid a 22 productores de cinco provincias


La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) de Valladolid presentó ayer la VI edición del Mercado de Alimentos Ecológicos que reunirá mañaña a un total de 22 productores procedentes de la provincia organizadora y de municipios de León, Segovia, Burgos y Zamora. "Se trata de apostar por impulsar la venta y la relación directa entre consumidor y productor en un lugar de encuentro, mediante un sector dinámico como el de la agricultura y ganadería ecológicas", según explicó el coordinador de la organización agraria, Valentín García.

La plaza de España de la capital vallisoletana será escenario del mercado de 10 a 15 horas, con el que colabora el Ayuntamiento cediendo la infraestructura, la conexión eléctrica y contenedores. Los profesionales que poseen el certificado de Consejo de Agricultura Ecológica de Castilla y León pondrán a la venta legumbres como garbanzos, alubias, lentejas, aceite de oliva de Tudela de Duero (Valladolid), chocolate elaborado en Zamora y pan artesano, junto a productos procedentes del ámbito ganadero como quesos, yogures, leche de ovino y vacuno.

Además, por primera vez en las seis ediciones celebradas hasta ahora el mercado ecológico acogerá una gran exposición compuesta por hasta 350 variedades vivas de tomate de todo el mundo. El objetivo es que los consumidores puedan probarlas, comprobar sus distintos sabores e incluso conseguir semillas plantarlas luego en huertos familiares.

Valentín García señaló que los productores de alimentos ecológicos respaldan el mercado "ya que siempre han tenido un gran éxito de ventas y agotado sus existencias", al tiempo que señaló que pese a que el precio es un poco mayor que el fijado en los productos sin certificación de este tipo "el consumidor aprecia la diferencia al probarlos y entiende que compensa pagar algo más dada su gran calidad".

Por su parte, la concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Valladolid, María Sánchez, lamentó que el mercado no se pudiera celebrar el pasado año por distintos motivos y apeló "al necesario apoyo institucional" para promover formas productivas "beneficiosas para la ciudadanía". En esta línea comentó que anima a los vallisoletanos a que acudan y conozcan alimentos que "cuya venta sirven para generar una economía local y que son elaborados de forma respetuosa con el medio ambiente, además de valorar el trabajo de los pequeñas explotaciones agrícolas y ganaderas de la Comunidad".

A juicio de la edil, el Consistorio apuesta por estar la lado de organizaciones como UCCL conociendo cómo trabajan en sus sedes y acercándose a ellas "sin protagonismo a actividades y espacios donde realizan actividades beneficiosas para la ciudadanía". En torno al mercado del próximo domingo, destacó que en Valladolid se añade "la profileración de huertos urbanos y redes de consumo ecológico que van saliendo adelante y con poco se hace mucho, en el caso de facilitar una instalación de compra y venta de alimentos saludables y sostenibles".

Cercanía alimentaria

Emilio Álvarez, técnico de la UCCL de Valladolid, puso de manifiesto la importancia de que "quien vende conozca a quien adquiere lo que produce y que consumidor haga lo propio", y destacó que todos los alimentos del mercado ecológico se cultivan y transforman en un radio que no supera los 100 kilómetros de distancia entre las cinco provincias de procedencia. "Hay pues un ambiente de cercanía donde prima la calidad y se favorece la salud de los consumidores y el entorno natural. Todos ñps productores recurren a una serie de técnicas que contribuyen a mantener los ecosistemas y a a reducir la contaminación", puntualizó.

Álvarez reconoció que pese a haber duplicado el número de hectáreas de cultivo de alimentos ecológicos en los últimos dos años en la Comunidad y crecido también el de explotaciones de ganaderías ecológicas "se está a la cola del conjunto del Estado, lo que viene derivado de una falta de apuesta institucional por el sector". Finalmente, achacó el problema "a los cambios en las ayudas agroambientales" aunque precisó que "de todas formas hay gente que siguen apostando por la producción ecológica".

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